miércoles, 26 de agosto de 2009

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Alguien me ha dicho que en la vida siempre empieza todo con muy bien pie, hasta que llega una piedra y hace que te lo tuerzas!
y, voluntaria o involuntariamente, queriendo o sin querer, con maldad o sin ella..haces que otras personas se tropiecen contigo, hasta el punto de que no quieran volver a encontrarse esa piedra por el camino..

Pero el mayor defecto (o virtud como apuntan algunos) del hombre es caer dos veces en la misma piedra..
y a veces desean ser ellos quienes tropiecen sin parar a que sean sus allegados los que lo hagan..

A veces es irremediable, la confianza da asco, asco hasta el punto de vomitar frases que pueden tirar por la borda la confianza cultivada entre otros..
Pero la amistad es esto, no un jardin de margaritas donde en sus pétalos solo aparece un "me quiere", no, la amistad es dar y recibir, contar y escuchar, sorprenderse y decepcionarse..

Muchas veces escucho: "haz caso a tus mayores, que han recibido muchos palos en la vida y les han hecho madurar"..
Y con pequeñas cosas, como esta, lo haces..
los pequeños detalles son los que verdaderamente importan..

Perdonar y olvidar.
Es lo que dicen.
Es un buen consejo pero no es muy práctico. Cuando alguien nos hiere deseamos herirle, cuando alguien nos trata mal queremos tener razón...
Lo máximo que podemos esperar es que algún día tengamos la suerte de olvidar

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