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Se va el 2010 y, aunque no he podido coger más enfermedades terminadas en -itis en los últimos días, hoy toca salir para celebrar que se termina este año. Y es que haciendo balance, no ha sido para nada un buen año.

Pero yo, que (aunque no lo parezca) soy un optimista por naturaleza, me quedo con todo lo que he aprendido porque, si algo tienen los malos momentos, es que sales reforzado de ellos. Miro hacia atrás y compruebo que en algunos aspectos he crecido más en doce meses que en 20 años, y al final eso es con lo que te quedas.

Pero no todo ha sido malo, y es que el 2010 ha estado plagado de momentos que se quedarán grabados en mi memoria: Marbella, Cádiz, Alicante, Halloween, noches de fiesta, días de universidad, noches de pub irlandés y dardos, días de piscina, noches de karaoke, tardes de parque, sorpresas inesperadas...También fui a la ruleta de la suerte y me llevé un buen pico, descubrimos que Altea fue un dinosaurio en otra vida, hicimos botellón ecológico, Ainhoa se puso piripi, creé el éxito "Pulga", Rosa se superaba sorprendiéndonos con sus trabajos, nos hicimos ludópatas del poker, Willy nos enseñó a bailar el Spirit Fingers, nos desterraron al zulo...

También ha habido amistades que se han perdido, otras que se han reforzado y otras que han quedado en el limbo. Y sobre todo pinceladas de lo que nos depara el futuro.

Y tras este año loco, surrealista y tan cargado emocionalmente (que encima se terminó Perdidos), habrá que hacerle caso a Shakira y brindar para que este 2011 vuelva a salir el sol y brille más que nunca.

Feliz año =)

Y, al fin y al cabo, no me siento como si fuera Navidad.

Perspectiva navideña

A veces tenemos que recordarnos que no somos como nadie más, que es una tontería intentar falsear lo que ven los demás. Empiezas con pequeños cambios hasta que no sabes quién eres, rodeándote de amigos que te dicen que eres lo mejor. ¿Y para qué?

Las cosas que no caben ni en un puño son las que nos definen. Yo aún tengo mi voz, y es algo que nadie se puede llevar.

Y es que a veces se daba cuenta de que estaba más solo de lo que creía, y ver que los demás no le hacía cuestionarse muchas cosas.

Creo que debemos valorar lo que tenemos y sentirnos agradecidos por ello. ¿Para qué esperar a perderlo? Quizás luego es demasiado tarde. Pero también deberíamos tener empatía, intener ayudar a los demás, que la vida da muchas vueltas.

Tendríamos que darnos cuenta de lo importante que es todo lo que nos rodea, de lo importante que es que estemos aquí. Luego, sin avisar, la vida ha pasado y ya no puedes aprovecharla.

Haz que cada día merezca la pena, que el sol acabará saliendo.

Con esfuerzo, tiempo y paciencia podemos conseguir lo que nos propongamos. No temas ir despacio, teme no avanzar.

Nueva década

Ahora que ya tengo 20, si me he dado cuenta de algo, ha sido de que hay pocas cosas peores que la ausencia. La sensación de que hay algo que falta, que está lejos y que no va a volver para llenar el hueco que ha dejado.

Ausencia de personas, de objetos, de recuerdos...Hay muchos tipos, todo se reduce a lo mismo. Buscamos la forma de que desaparezca, creemos que es posible, que saldremos adelante, que olvidaremos, pero no nos damos cuenta de que pesa demasiado. La ausencia es vacío.

Nota Mental

La vida está llena de buenas ideas que luego resulta que no lo son tanto.

Huesos

Puedo hacerme un experto en usar lágrimas de cocodrilo solo para abrirme paso, puedo decirte las cosas que quieres oir hasta que se me acabe la voz, pero si llego al sitio que yo creo que es mi hogar y me doy cuenta de que ya no pertenezco allí, ¿cuál es el sentido?

Y si encuentro el fin que justifica los medios...¿Podría vivir con ello? Y si es verdad que tener demasiado de cualquier cosa buena sólo puede ser malo...¿cuál es el sentido?

Es como estar sediento en un desierto con una bolsa llena de oro, lo que pensaba que era valioso sólo son piedras. Puede que tenga un tesoro, pero estaré sólo...como un puñado de huesos.

¿Cuál es el beneficio si estoy ganando todo pero a la vez lo estoy perdiendo?

Me encanta poder gritar y hacer el tonto. A veces me gustaría ser más serio y calmado, aunque cuando lo soy, mis amigos piensan que estoy triste (y normalmente lo estoy).

Yo no sé cómo la gente no tiene más problemas mentales, pensar es una de las cosas más estresantes por las que he pasado, y no ser capaz de decir lo que quiero me vuelve loco.

Qué le voy a hacer.

Otra vez

Una noche puede cambiarlo todo y a la vez no cambiar nada. La rutina vuelve a devorar nuestras vidas y lejos queda el recuerdo de tus labios.

Este año volver cuesta más de lo que hubiese imaginado, pero habrá que acostumbrarse. A ver que sorpresas guarda este curso.

Lugar adecuado, momento adecuado

Sigo intentando creer que el destino tiene un plan, que un día voy a salir de casa y mi vida va a cambiar por completo, que estaré en el lugar adecuado en el momento adecuado.

Pero parece que últimamente se empeña en putearme, que nada me sale bien, que no hay esperanza a la vista.

Me voy a tomar un respiro en eso de intentar cambiar el mundo, y mientras, seguiré esperando.

Altas temperaturas

A estas alturas comienzo a plantearme si debería haberme ido de erasmus. Igual es porque está haciendo demasiado calor, pero a veces me ahogo.

El conformismo ha desaparecido, y ya no tengo tanto que me ate aquí. No sé, quizás necesito aires nuevos, Madrid a veces se queda muy pequeño.

Lo mismo es que tengo demasiadas expectativas, pero lo único que hago es correr en círculos.

Y al final del día, lo que haces y lo que dices es lo que te hace ser quien eres.

Donde dije digo...

Gracias por las palabras en la otra entrada. Sinceramente, iba a cerrarlo porque pensaba que ya no necesitaba encadenar mas pensamientos, que no me servía de nada, que igual era algo que debía acabar, no por visitas o comentarios. Y también pensaba últimamente otras muchas cosas, y estaba equivocado...Cometo errores y lo seguiré haciendo.

Como el deseo que pedí ayer, aún sabiendo que no va cumplirse por culpa del cielo sin estrellas de Madrid. Pero es que no puedo evitarlo, irrumpes en cada sueño, en cada pensamiento. Estás en los cristales del metro, en el parque donde quedamos para fumarnos un cigarro, en las aceras por las que camino a veces con rumbo, otras tantas sin él.

No sé explicar por qué te echo de menos así, qué es lo que ha cambiado. Sólo me queda la esperanza de que te pase lo mismo a ti, pero sé que es posible que cuando vuelvas se rompa algo más que una ilusión. No estoy hecho para que nadie se fije en mí, y menos tú.

Y mientras tanto, aquí sigo sólo, más de lo que aparenta mi sonrisa, más de lo que a veces creo.

Hay decisiones que juntan dos caminos y hay otras que los separan antes de lo previsto.

Insomnio

No sé que pasa conmigo, llámame raro, pero cada día entiendo menos el mundo. Cientos de preguntas me asaltan cada día y las respuestas parecen no tener ningún tipo de lógica. Como caminar por el mar, como volar sin necesidad de alas. Incongruentes que caminan pensando que lo saben todo y no tienen ni idea de nada, que creen que les falta algo y en realidad lo tienen todo. Y no se dan cuenta.

No sé que pasa conmigo, llámame raro, pero cada día el mundo me entiende menos. Soy consciente de que el tiempo se consume y lo demás no cuenta, y al final sólo nos queda lo importante. Pero yo no lo tengo. Sólo quiero aprender a caminar por el mar, a volar sin necesidad de alas.

Últimamente no duermo bien, y no es por el calor.

¿Por qué no?

Hoy es el día del amigo, una fecha que en España no se celebra, aunque sí en unos cuantos países. Y yo me pregunto, ¿por qué no?

Seguramente al que lo ideó se le tratase como a un loco, pero yo creo que es una idea fantástica. Está claro que en la mayoría de los casos la familia es un pilar fundamental en nuestra vida, pero los amigos también ocupan un lugar muy importante y tener uno es algo que celebrar.

Y ya que hoy en día el afecto sincero es algo en desuso, podíamos ponerlo en práctica aunque fuese por un día. Así que desde aquí quiero felicitar a todas las personas a las que me alegro de haber conocido.

Porque cuando se juntan dos ríos se hace fuerte la corriente

En la frontera

Ahí es dónde me he mudado. ¿Cruzar la línea y conseguirlo todo o romperlo en mil pedazos? Es probable que lo mejor sea dejar las cosas como están, en calma. Demasiado insospechado para pensar que es verdad, ¿Cómo podría suceder?

Y aquí estoy, echándote de menos, de una forma distinta a la de hace unas semanas, pero sé que es imposible. Sé que es algo prohíbido por naturaleza, nadie lo entendería, ni siquiera lo hago yo.

Esto es algo más que la soledad de doce largos meses, pero supongo que habrá que dejarlo pasar. El verano es largo y acaba de empezar.

Hay tantas cosas que no sabes de mí...

Se acaba

Espero que te vaya todo muy bien. A mi tambien aunque no te interese.

Es realmente complicado seguirte la pista y la verdad que tu no nos lo pones nada facil. Se ve que no te acuerdas demasiado de nosotros, y el interes se acaba desgastando. Nunca se olvidarán tantas tardes soñando, ni siquiera esas en las que no teníamos nada que hacer, pero al final resultó ser una gran distancia.

Ojalá que tengas suerte.

Adiós.

Carpe Diem

La esencia es la misma pero el envoltorio ha cambiado.

Dónde veía errores ahora veo experiencia, dónde veía problemas ahora veo soluciones. La fragilidad me ha hecho fuerte, y ahora sé disfrutar de las oportunidades que se presentan.

Es el momento

Falta una pieza que no he logrado encontrar, me duele la cabeza y sé lo que me van a decir.

Pero si quiero, puedo, joder, que ya he pasado por cosas peores.

Que ya no crees en la gente, que sueñas con no soñar

Y no sé por qué le damos tanta importancia a algunas cosas, si cuando seamos ceniza sólo nos recordarán por los buenos momentos.

Palabras más, palabras menos

No voy a caer dos veces en la misma piedra, no soy algo de usar y tirar. Me lo voy a grabar desde hoy en la piel, para que no se me olvide a largo plazo, que a corto no lo necesito.

Y ya que estoy, también voy a grabarme que, un día, me hice una coraza y aprendí a contar las personas que me importan de verdad con los dedos de una mano. Esto hará más fácil que, llegado el momento, sepa desprenderme de los demás.

Todo está cambiando

Un adiós camuflado de hasta luego para suavizar la situación. Caminando en mis pensamientos de hace unos meses, me doy cuenta de que la culpa la tiene la navidad, que tras su falso calor acaba helando todo a su alrededor.

Es lo malo de las despedidas, que no puedes reciclar el tiempo. Que los recuerdos siempre van a estar ahí, a veces para bien, otras para mal, pero la ilusión se va apagando poco a poco.

Otra vez he vuelto a hacer gala de mi mala intuición, pero así es la vida, creer que hay cosas que son inalterables es un gran error.

¿Qué está pasando? Todo cambia demasiado rápido y no logro entenderlo del todo. Hay cuadros a los que el paso del tiempo les hace bonitos, pero a este le están empezando a salir demasiadas grietas.

¿Aires nuevos? No, aires raros.

Jack Johnson estaba equivocado, alguien debería decírselo.

Hoy no hay palabras, he enmudecido. El silencio ha conquistado mi habitación y hace que tu recuerdo inunde cada rincón.

Ahora, que se ha ido el sol, voy a intentar soñar que todo ha sido tan sólo una pesadilla. Mi casa crece por momentos y no presto atención al termómetro, me estoy muriendo de frío.

Voy a jugar a no sentirme tan sólo, a pensar que la distancia ya no es un impedimento para que estés conmigo aquí y ahora. No quiero tener que echarte de menos.

Y aunque se haga difícil respirar, prefiero quedarme con lo vivido y no con el adiós.

Siempre

Puede que este cielo esté nublado, pero sabemos que detrás hay un sol que ilumina nuestros caminos, nuestras vidas y sobre todo a nuestros seres queridos.

Te regalo este cielo para que lo atravieses con la mirada y encuentres el sol cada vez que lo necesites.

Siempre estaremos juntos, como el templo y su reflejo.

Hoy es otro día para encontrarte...y empiezo a creer que me has abandonado.

No digas nada

Hablar sin parar no significa comunicar, tú lo sabes muy bien. Te gustan los silencios, forman parte de tí, y eso te hace especial. Y mientras hay tanto ruido a nuestro alrededor, a nosotros nos sobran las palabras.

Un segundo

Es lo que tarda en cambiarte la vida, tan sólo eso, un mísero segundo. En el momento te ríes, "tan sólo ha sido una pequeña anécdota" dices. Pero, ¿y si no hubiera quedado ahí? ¿Y si de verdad hubiera pasado algo?

Un despiste, un instante y todo puede cambiar. La vida se te escapa y no te dan opción de luchar. Todo cuanto conoces desaparece, y nada...sólo eso, nada más. Se acaba, y puede que no haya vuelta atrás.

Y empiezas a preguntarte tantas cosas...

Recrear

Y así, de repente, un torrente de preguntas me invade, preguntas que despiertan sentimientos encontrados. ¿Y sí nada hubiera cambiado, si las cosas hubieran seguido su curso? ¿Sería muy diferente la historia ahora? Estoy seguro de que sí...

Igual la redención llegó tarde, pero yo siempre he llevado el reloj atrasado diez minutos. Quizás haya llegado el momento de ponerlo en hora.

Quiero comprenderte, de verdad, pero es que a veces no me comprendo ni a mí mismo.

Lo que no nos mata nos hace más fuertes. El dolor es igual de necesario que el placer, tan sólo aprovéchalo. Crece. Madura. Aprende. No cometas los mismos errores. Es algo que he tenido que aprender a la fuerza en algunos momentos de mi vida, porque si no creía que me moría de tristeza.

Si no te aplicas el cuento, no paras de sufrir. Y aunque malograr su vida es un derecho inalienable del ser humano, yo soy de los que piensa que, aunque se oigan grandes truenos, pronto saldrá el sol.

Los pequeños momentos son los que hacen que cada día pueda ser especial, saber apreciarlos o no está en nuestras manos. Algo tan trivial como tomar el sol mientras conversas tranquilamente, una gran carta en el bolsillo o tomar algo por ahí pueden ser cosas que hagan que te sientas mejor.

Debemos aprovechar, que cada momento cuenta, y luego los menos pensados son los que más recordamos. Tan sólo déjate llevar, que la vida pasa mientras haces otros planes.

Culto al cuerpo

Hoy hay pensamientos aislados, no soy capaz de encadenarlos. Odio los cánones que impone la sociedad, y lo peor de todo es que en el fondo me gustaría seguirlos. Me gustaría ser delgado, tener una nariz más pequeña, ser una de esas personas con una vida perfecta. Y no lo entiendo. ¿Por qué ser tan artificial? ¿Por qué no ser simplemente nosotros?

Nadie se enamora de los demás por el físico, ni elige a sus amigos por la belleza, o al menos no por la superficial. Prefiero cultivar mi corazón a mis abdominales, creo que, al final, se llega más lejos. La felicidad se nota en tu mirada, en tu sonrisa, en tu voz, y eso no lo da ni diez ni mil horas de gimnasio.

Y no piensas que eso ya da igual, que ya no vas a impresionar

Nada

No se si no tener una razón por la que escribir es malo o bueno, hasta que lo descubra me lo tomo como una ausencia de señales, sin más. Aunque puede que eso sea una señal en sí.

Sólo quiero que el tiempo corra, que llegue la calma cuando aún no ha llegado la tormenta. Que todo se estabilice, que aún tengo que asumir muchas cosas, que esta vez ha ganado la razón. Quiero que el futuro sea presente, y detener ese momento en el que empieza lo mejor.

Me sobran las ganas.

Casita en Canadá

¿Sabes? Es una chorrada...Pero me ha venido a la cabeza el día que discutimos, que estuvimos un día sin hablarnos...Era la primera vez que nos enfadábamos así en todo el tiempo que hace que nos conocemos, que la verdad que con la de tiempo que pasamos juntos es raro! Pero no sé, lo pasé fatal...y me dí cuenta de que no aguantaría así, que te necesito, que eres imprescindible en mi vida. Bueno, puede que eso no sea nada nuevo, pero en ese momento lo sentí así, y fue algo grande.

Los dos tenemos virtudes y defectos, que ya nos conocemos de sobra, pero todo se puede ir puliendo. Pero lo importante es que sigas a mi lado, porque todo lo que me pasa es mejor si estás conmigo. Me encanta compartir mis alegrías contigo, y el simple hecho de verte feliz, me hace feliz a mi también, y no lo digo por decir, es así.

Es imposible encontrar a alguien como tú, y sobre todo, encontrar a alguien que conecte tan bien conmigo, que soy más raro que una señora rascándose el culo en el metro (aunque se han dado casos), por eso no hay día que no me sienta agradecido de haberte conocido.

¿Sabes? Te conocí en una época bastante complicada para mí en cierto sentido, una época de muchos cambios, de sentir que me perdía muchas cosas. Todos, pero sobre todo tú en concreto, me has ayudado a ser lo que soy hoy en día, a sentirme tan bien y a moldear muchos aspectos de mi vida.

Y aunque la perspectiva de que nuestros caminos se separen tarde o temprano me asusta mucho, se que por muy lejos que estemos, siempre te voy a tener a mi lado, como tú a mi, porque aún nos quedan muchos capítulos por escribir.

Tú siempre serás mi estrella

Gracias

Cuando pasa algo, cuando tienes un problema y más sólo te puedes sentir, es cuando te das cuenta de la gente a la que realmente le importas. Puedes ver quienes son los que permanecen siempre a tu lado, fieles en todo momento. Los que corren a ayudarte, a intentar hacerte sentir bien, y no se lo piensan.
Incluso puedes ver a esa gente que te tiene mucho aprecio, aunque la relación se haya perdido con el tiempo, pero no dudan en hacer una llamada en cuanto el boca a boca hace efecto.

Cuando pasa algo, cuando tienes un problema y más sólo te puedes sentir, es cuando más te llena todo ese cariño.

Gracias a todos los que me han hecho sentir tan arropado.

No hay una acción que conlleve más amor que el perdón. Cuando perdonas a alguien le estás demostrando lo muchísimo que le quieres.

Mejor Mañana

Creo que acabamos estableciendo los vínculos más especiales con las personas más insospechadas, y este caso es un claro exponente. Es muy probable que poca gente pueda llegar a entender claramente una amistad como esta, pero la verdad que eso tiene poca importancia.
No he vivido muchos momentos a tu lado, pero sin embargo los pocos que hemos estado juntos merecen la pena recordarse todos. Y a pesar de esto, nos ha dado tiempo a tener hasta algún problemilla, pero siempre con solución.
No sé que habrá sido lo que haya creado el clima de confianza, si las conversaciones hasta las tantas, o la sonrisa que se me dibuja cuando me abres una conversación, el sobresalto que me dio escuchar tu voz de nuevo cuando llamaste a Burriana, que somos tan parecidos y a la vez tan iguales, mis problemas y tu manía de valorarte poco, tus problemas y mi manía de que se me eche el mundo encima. Pero lo cierto es que me has inspirado a contarte cosas comprometedoras, que me podía haber callado, pero sabía que no me ibas a dejar de lado.
Porque aunque estás algo lejos, sé que no me abandonas.

Y espero seguir mandándote canciones (en español, claro) mucho tiempo, que me sigas respondiendo de una forma asombrosamente instantánea en el tuenti, que me vuelvas a hacer la comida del pobre, cantar en un karaoke y subirme en una plataforma a bailar, ir a otra fiesta latina...porque aún nos quedan tantas cosas por hacer...

Porque conocer a alguien como tú es una de esas cosas que hacen que la vida valga la pena.

Pero, sobre todo, porque espero poder seguir pensando que siempre habrá un mejor mañana.




Si tú te vas me quedará el silencio para conversar

Creo que a veces queremos tanto a algunas personas que tenemos que insensibilizarnos, porque si sintiéramos de verdad lo mucho que los queremos nos moriríamos. Eso no significa que seas una mala persona, sino que tienes el corazón demasiado grande.

Y lo que queda

Ya perdoné errores casi imperdonables. Traté de sustituir personas insustituibles, de olvidar personas inolvidables. Ya hice cosas por impulso. Ya me decepcioné con algunas personas, mas también yo decepcioné a alguien. Ya abracé para proteger. Ya me reí cuando no podía. Ya hice amigos eternos. Ya amé y fui amado pero también fui rechazado. Ya fui amado y no supe amar. Ya grité y salté de felicidad. Ya viví de amor e hice juramentos eternos, pero también los he roto y muchos. Ya lloré escuchando música y viendo fotos. Ya llamé sólo para escuchar una voz. Ya me enamoré por una sonrisa. Ya pensé que iba a morir de tanta nostalgia y ... Tuve miedo de perder a alguien especial y terminé perdiéndolo. Pero sobreviví... y todavía vivo.

Cada vez que sé que voy a verte me pongo triste, pero sólo para que no se me olvide lo feliz que me hace el tiempo que paso contigo

Hoy he vuelto a emocionarme viendo "La joven del agua", no importa cuantas veces la vea, no lo puedo evitar.
Todo el mundo tiene un propósito, una razón por la que vivir. Todo el mundo es clave para la vida de otra persona.Ese es el mensaje principal de la película.

El protagonista, Cleveland, descubre que su misión es proteger y devolver a Story a su casa, pero por encima de todo Story acaba haciéndoles ver a todos los personajes, hasta al más insignificante, que todos tienen una misión.
Sin duda un mensaje lleno de esperanza y optimismo, un intento de hacer que todos sepamos que estamos conectados, que un acto de uno puede un día afectarnos a todos. Creo que es algo que todos necesitamos creer, que nuestra existencia tiene algún tipo de sentido, que estamos aquí por algo.

Nos hartamos de ver cada día en los medios como personas que eran como nosotros se transforman en héroes porque han hecho algo importante. Pero, ¿realmente lo que hacemos nosotros, las decisiones que tomamos en nuestra vida cotidiana, no tienen ninguna importancia? Yo creo que sí, que nuestros actos dejan, de alguna forma, una huella en la humanidad, una huella que no va a poder ser borrada. Quizás no se pueda ver, quizás no quede registrada en ningún libro de historia, pero la gente que te rodea sí que puede sentirla.

Es nuestra pequeña historia, un cuento que vamos escribiendo con el paso de los años.

- Adiós
- ¿Te vas? ¿Adónde te vas?
- Me voy lejos, muy lejos, más lo que jamás podrás imaginar, a un sitio que no vas a poder encontrar nunca. Lo tenías, y acabaste tirándolo. Ahora se ha ido y tengo que ir a buscarlo, porque hace demasiado frío, y ya no podré volver.
- Pero, ¿y mañana? ¿te veré?
- Sí, como siempre...y como nunca más.


A veces cerca quiere decir lejos, sólo hay que aprender a leer las miradas.

Salía de casa de una amiga y la lluvia me ha devuelto a la realidad. Me he puesto a correr para llegar rápido a mi casa, todo el trayecto era descubierto y mi abrigo se estropea con la lluvia. Pero un destello en un charco me ha hecho detenerme. Embobado, miro al cielo y veo una luna más resplandeciente que todas las farolas de las calles juntas. Una luna que era capaz de iluminar el alma de cualquiera.

Hiptonitazo, ajeno a la lluvia, al frio, al aire, al abrigo y a la futura gripe, me enciendo un cigarro. Me gustaría ver las estrellas, pero en Madrid no hay. Hubo un tiempo en el que salían, pero la gente está demasiado contaminada para sentarse a observarlas, y se sentían solas.

Pienso que soy una de esa clase de personas que en realidad no pertenece a ninguna clase. No me gustan las etiquetas ni los prejuicios. De alguna forma la luna me vacía,me hace sentir extraño, un poco menos consciente del mundo. La siento muy cerca, aunque esté a años luz.

Me termino el cigarro. "Si cuando llegue a casa sigue brillando igual, todo va a ir bien" pienso, haciendo un esfuerzo por concentrar toda la inocencia que los baches no han tocado. Y echo a correr.

Y en mitad del relámpago llegó el mal de altura

Tiempo

Con los años, todo se vuelve más difícil. Nuevos compromisos, otros conocidos, ritmos diferentes.Y a veces uno tiene la impresión de que se ha perdido, de que no ha dado la importancia adecuada a las relaciones. Los sms ya no llegan al ritmo de antes, las salidas nocturnas se reducen, las promesas de volver a verse se posponen por una razon u otra. Te preguntas qué es lo que has hecho mal, por qué te sientes tan sólo cuando antes estabas tan rodeado.

Hay que esforzarse. Defender las relaciones. Renovarlas. Tratar de atravesar el tiempo sin perderse.

Pero bueno, lo cierto es que todavia estamos aqui.

Te voy a decir una cosa

Siempre tan comprensiva, siempre tan sabia, siempre tan profunda...
Me asusta ver que tienes miedo, porque nunca lo has tenido, ni en los momentos más cruciales. Si hay algo que te caracteriza es tu gran valentía, y verte así es algo que me viene grande.
Me rompe por dentro verte triste, porque tu sonrisa y tus bromas son capaces de animar el día más amargo, porque nadie como tú le echa ganas y optimismo a la vida, y tu dulce voz calma la mayor de las furias. Intento cuidarte, pero a veces no te dejas, y cuando te descubro suspirando a solas sé que aunque te esfuerzas por ocultarlo, algo no va bien.
Me enorgullece tu gran fuerza, que nadie va a romper, por crueles que sean las palabras que te digan.
Ahora, que es un momento tan importante, vas a contar conmigo más que nunca, porque si te pasa algo yo me muero.

Abstracción

Se me van de las manos, se me escapan ideas, conceptos, palabras, pensamientos...Hay cosas que se me quedan grandes, que mi cabeza no alcanza a comprender. Quizás la experiencia me ayude con algunas, pero habrá otras que no lograré encadenar. A lo mejor simplemente es por mi personalidad.

También se me escapa el tiempo, que pasa demasiado rápido y me deja una sensación agridulce. Transforma los buenos momentos en diamantes que vas puliendo cuando todo se tuerce, pero me hace sentir que, aunque no lo sepa aprovechar, cada minuto cuenta.

Quizás no podamos elegir lo que somos, pero si lo que no queremos ser

Corre

Entro corriendo en casa. “¿Hay alguien?” pregunto sin obtener respuesta. Pero eso no me detiene, me falta tiempo, y corro, habitación por habitación. Y abro cajones, tiro las cosas de la estantería, registro todos los armarios. La presión en el pecho cada vez es más fuerte y me cuesta respirar. Necesito encontrar algo, aunque sería más fácil si supiera que es. Presiento que está cerca, el corazón no podría latirme más fuerte. Nervioso, me enciendo un cigarro. Me tiembla demasiado el pulso como para darle más de tres caladas, necesito salir. Está lloviendo fuera y hace mucho frío, pero me importa poco, necesito respirar. Salgo de casa, llamo al ascensor, pero tarda demasiado. Sin detenerme, bajo las escaleras lo más rápido que puedo. Al llegar a la puerta, durante un instante me detengo a ver mi reflejo. Estoy pálido y las ojeras revelan más de lo que desearía, pero sigo corriendo. Y corro con todas mis fuerzas, aunque me falta el aliento, siempre quedó pendiente dejar de fumar. Entro en el parque pero sigo corriendo, de manera autómata, como si mis pies supieran mejor que mi cabeza a dónde voy. Y cada metro que avanzo me ahogo un poco más, el frío y la lluvia calan mis huesos, el pecho me aprieta demasiado y no puedo pensar con claridad, sólo me dejo llevar. Y sigo corriendo y llego a una pradera...a la pradera. Me doy cuenta de que mis pies se han derrumbado ante mis rodillas. Intento mirar alrededor, pero lo veo todo demasiado borroso, el corazón me late con demasiada fuerza como para oír algo más. Y la respiración se debilita, el corazón late con violencia, miles de recuerdos invaden mi cabeza, y se corta la respiración, el corazón se me va a salir del pecho, los recuerdos pasan demasiado rápido y grito. No es un grito normal, es desgarrador, he podido sentir cómo se escapaba mi alma junto con mi voz. Y luego...nada...Sólo paz.

Y aunque he renunciado a muchas cosas por hacer lo que quiero, a pesar de soportar todas las críticas por seguir mis ideales, me he dado cuenta de que estoy perdido. Es posible que esa esencia a la que era fiel contra viento y marea haya perdido hasta el último atisbo de significado.

Rechacé ir por el camino popular porque nunca me han ido los atajos. Pero de tanto salvar obstáculos he tropezado, se ha hecho de noche, la niebla me ha desorientado y la inocencia que me guiaba ha desaparecido sin dejar ni rastro.

Y, muerto de frío, en medio de la nada y entre tanta gente, echo de menos el atajo y pienso que quizás no estaba tan mal. Pero sé que quizás ya es demasiado tarde para cogerlo, y que aunque encuentre el camino que decidí seguir, no se si tendré la fuerza suficiente para seguir levantándome una y otra vez, ya no me sobra la ilusión como antes.

Es posible que, al fin y al cabo, la vida haya dejado huella en mí.

Miedo

Y la cosa sigue y sigue, y, al final, me llena la cabeza borrando recuerdos y esperanzas de sobrevivir, borrándolo todo salvo el presente, que empieza a parecerme eterno. Nunca existirá otra cosa que no sea este frío, este miedo...

Cuando todo está bien, está bien, tan bien...hasta que vuelve a estar mal

Lo que hemos vivido

Antes todo estaba bien, yo lo agradecía y me desvivía por corresponder, a veces dando más de lo que he podido recibir. Pero ahora...no sé, me aparto poco a poco, pongo un muro de por medio, como una estrella que desaparece lentamente del firmamento, sin hacer mucho ruido.

Nunca he sido una estrella que deslumbre ante las demás, pero soy de las que luce cada día, sin causar mucho revuelo, pero constante.

Me engaño pensando que mi corazón ya está blindado, pero en el fondo sé que no es así. Que las dudas le duelen demasiado, y ser desagradable sólo es una pose. En el fondo, le pesa demasiado acordarse de los tragos amargos, las pasiones y sueños, las risas...

Ya no vale con no pensar, ahora necesito no sentir

Frágil

Destruir algo es más fácil que construirlo. Pero el verdadero reto viene después: reconstruirlo.
Ojalá todo resurgiera de sus cenizas cuan Ave Fénix, pero normalmente no es así. De hecho, creo que nada vuelver a ser lo que era al 100%.

Por mucho que te esfuerces, las segundas oportunidades nunca mejoran a las primeras. La reconstrucción exige un esfuerzo diario, una atención extra. Pero aunque la superficie vuelva ser igual, ¿el interior también lo es?

Yo creo que no...al fin y al cabo, tu sabes que esa cosa hubo un momento en el que estuvo rota, y ya no la vas a volver a mirar con los mismos ojos. Vas a andarte con más cuidado para evitar que pase otra vez, pero sabes que en el menor despiste puede volver a romperse, esta vez con más facilidad, y ya no volverá jamás.

Es importante aprender la lección

Amigo

Dícese de aquel que ves seis días a la semana y aún así sigues queriendo verle, aquel con el que sobran las palabras pero siempre tienes algo que contarle, de ese que no ves en mucho tiempo pero cuando estás con el todo es igual que siempre.

Dícese del que hace que hasta los lunes tengan un viernes escondido pero también comparte tus penas, el que te arranca una sonrisa con cualquier tontería, el que te hace la vida mejor.

Dícese de aquel que se gana tu confianza y se esfuerza por mantenerla, del que te ve como un fin y no como un medio.


Los amigos están infravalorados hoy en día

Me gusta ver como cae la lluvia...No sé, no lo puedo evitar, es algo que siempre me ha encantado.
Cuando veo llover imagino que la lluvia escribe sobre el suelo miles de frases…siempre distintas, porque siempre llueve distinto.
Y me imagino que puedo pedir un deseo, elegir una de las miles de frases que las nubes escriben en el polvo y que ese deseo se convertirá en realidad.

Trampas

Hay gente a la que le encanta hacer trampas, en el juego y en la vida. Hay personas que no dudan en pisar a cualquiera que se ponga por delante con tal de conseguir lo que quieren: dinero, un trabajo, un reconocimiento...
Yo, afortunadamente, pienso que no estoy en ese grupo, que aún conservo algo de moral en este mundo tan enfermo. Me da igual que me pisen, me da igual que me engañen...Soy honesto y no pienso cambiar, prefiero que mi conciencia me deje dormir por las noches.

Más de una persona me ha dicho que en la vida no llegas a ningún lado siendo tan bueno, que se piensan que eres tonto. Pues yo creo que el talento y el esfuerzo son dos armas mucho más poderosas que cualquier daga envenenada, que el tiempo, más tarde o más temprano, pone a cada uno en su sitio.


Hay que ser legal en todos los aspectos

All-in

Que triste pasar tanto tiempo prejuzgando a alguien sólo para darte cuenta de que en realidad te parece interesante.

Y qué triste saber que nunca voy a tener el valor de dar el paso, que seguiré mirándote de reojo cuando nos bajemos en la parada y nuestros caminos se separen, que seguiré planeando delante del espejo mil formas de saludarte aunque mis labios no se atrevan a articular palabra, que seguiré imaginando lo que podría ser por el temor a que tú me hayas prejuzgado también.

Porque soy un fracaso amoroso con patas, porque seguirás siendo la chica del portal de al lado, la del final del autobús.



No se jugar mis cartas, soy incapaz de hacer all-in.

Sobran palabras

La gente suele creer en las palabras, pero yo soy de los pocos que creen en los silencios. Un buen amigo dice que los más callados muchas veces son los que más tienen que decir, y yo estoy con el. Creo que muchas veces la ausencia de palabras puede expresar más que alguno de los discursos más largos.
Silencios. Pueden significar cientos de cosas. Hay algunos que significan “Esto se ha acabado”, otros más optimistas dicen “No puedo vivir sin ti”. Los hay que dicen “Estoy muy arrepentido” mientras otros son un claro “No te arrepentirás”. Así podría hacer una lista infinita. Lo malo de los silencios es que hay que saber interpretarlos bien, porque si no pueden llevar a confusión, y no es una tarea nada sencilla.
Hoy has leído mi silencio. Te decía que era mejor no hablar, porque no ibas a llegar a ningún lado. Que yo no tengo nada que perder, pero que a ti te duele demasiado la verdad. Y ahora no se si felicitarte por ser cauto o añadir a la lista tu cobardía.

Es curioso que a veces los que más critican son los que más complejos tienen, y los que menos soportan que les critiquen a ellos.

NY

En un arrebato de nostalgia miro en la pared el cuadro que muestra Nueva York en blanco y negro, como solía hacer tiempo atrás cuando esperaba nervioso a que llegases. Pero en segundos vuelvo a la realidad: el cuadro ahora tiene color y movimiento...estoy mirando por la ventana.
Hace meses que me refugio en este cuadro vivo del dolor que me causa tu ausencia, y, aunque sigo adelante, no logro encontrar la emoción que me quemaba dentro. Las pequeñas cosas ya no son grandes si no estás.
Nueva York no parece tan maravillosa como tú la pintabas cuando pasábamos horas tumbados en el sofá, mirando aquella fotografía estática, fantaseando con el que sería el viaje de nuestros sueños. Ahora vivo aquí, y aunque nos separa algo más que un océano, a veces me descubro creyendo que voy a verte cuando cruce la esquina, y que harás que todo parezca una casualidad.
Y aunque no sabes dónde estoy, yo sigo esperando...por si algún día alguien quiere que me encuentres, por si decides que aquello valió la pena, que te pesan las cicatrices y la nostalgia de aquel tiempo que recuerdo como feliz. No importa la hora del día, que aquí las luces no duermen por si vienes a buscar el ático dónde ahogo las horas en las que intento no pensar en tu sonrisa.

Aquí estaré, dando vueltas por este cuadro, por si un día decides pintar otra realidad.

Sólo ceniza

Pensé que te iba a ver y que todo iba a ser diferente. Pensé que la tarde iría de otra manera y que la despedida sería algo más que dos precipitados besos. La vida da muchas vueltas, y si meses atrás me tocó a mí rogar algo más que un abrazo, el destino ha querido que cambien las tornas.

Será que he cambiado o que has cambiado tú, quizá sea que los dos estamos iguales pero distintos. Antes pensaba que lo nuestro no funcionaba, ahora estoy seguro.

Ya no siento nada salvo amistad por tí, ya sólo hay ceniza.

Propósitos

No sé..¿Es lo que se suele hacer, no? Propósitos para el año que empieza....Cosas que nos prometemos a nosotros mismos que vamos a cumplir pensando que así seremos mejores personas o más felices, pero que en realidad nunca acabamos cumpliendo.

Creo que este año solo voy a proponerme cosas que pueda alcanzar, como disfrutar más del momento, intentar no darle muchas vueltas a la cabeza, pensar muchísimo menos y aprender a dejarme llevar, valorar las pequeñas cosas y obviar los detalles feos sin importancia pero que tanto me suelen molestar, aprovechar los momentos de subida al máximo y ver lo positivo de las cosas hasta cuando todo se tuerce, disfrutar de las buenas compañías y apartarme de los que no valoran mi amistad. En definitiva, aprovechar más las cosas que me hacen sentir bien.

De momento, creo que he empezado a desprenderme de ciertas cosas que antes consideraba imprescindibles. Siento que dentro de mí ha cambiado algo, hace tiempo que se ha caído la venda que no me dejaba ver con claridad.

Este año todo va a ser muy diferente, han cambiado mucho las cosas. Y a quien no lo quiera ver solo puedo decirle que no hay ceguera peor que no querer mirar.

No nos gusta el cambio, es más, lo tememos, pero no podemos pararlo: o te adaptas o te quedas atrás. Duele crecer, quién diga que no duele, miente. Pero a veces cuanto más cambian las cosas, más siguen igual.
Pero..¿Por qué no? A veces el cambio es bueno, a veces parece que todo fluye y podemos avanzar.

Quizá por ser Navidad...

Que uno piensa en todo, me ha dado por recordar. Y he recordado nuestra primera conversación y ese mítico “Paloma, que dice que vamos a la 109”. De eso parece que hace siglos y en realidad fue hace poco más de un año, aunque qué año. Quería escribirte algo porque me siento muy agradecido contigo, porque eres de esas personas que sabe devolver lo que recibe, pero también dar sin recibir.
Eres alguien que ha creído en mí hasta cuando ni yo lo hacía. Siempre te has preocupado de ayudarme a ordenar mis ideas, a que estableciese prioridades, a que aprendiese a disfrutar cada momento y que sonriese cuando todo se torcía y me sentía perdido.
Me has comprendido cuando sentía cosas demasiado complejas, pensamientos demasiado abstractos para cualquiera. De hecho hemos tenido conversaciones que podrían resultar hasta demasiado trascendentales, pero sin saberlo, me has hecho mejorar como persona con alguna de tus frases.
Lo que intento decir es que eres una persona que te has preocupado e interesado por mí hasta cuando yo te dejé un poco de lado, y es algo que significa mucho para mí. En parte me siento en deuda contigo, porque creo que nunca he depositado en ti la confianza que debería por todo lo que me has demostrado, pero es algo a lo que le estoy poniendo remedio, porque por ti sé que puedo apostar.
Espero que sigas con tus arrebatos de amor espontáneos, que abraces sin ningún motivo concreto, que te rías maliciosamente cada vez que le haces una broma a alguien. Que seas tan noble, bohemio, gracioso y sonriente, que siempre le contagias a todo el mundo tu alegría y nos haces la vida más fácil.
Es extraño, pero contigo siempre he tenido la sensación de que eres una de esas personas que una vez entran en tu camino, ya no salen. Que siempre están ahí, haya rachas con una mayor o menor cercanía.
Siempre escuchas a todo el mundo, pero quiero que sepas que cuando necesites que te escuchen a ti, siempre voy a estar a tu disposición como te he tenido yo a ti.
Me importas muchísimo.

Better together